Hola Formentera

Tenía tantas ganas de conocerte…

Por fin un sueño realizado de una asignatura pendiente. En mis distintas visitas a Ibiza, no tuve la oportunidad de acercarme a la hermana Pitiusa. Y es que me ha sido tan aconsejada y tan recomendada, que ya era mucho el deseo por visitarla.

Vistas desde chiringuito Chezz Gerdi.

Para hacerlo tomamos un barco desde Denia. El trayecto dura unas dos horas. El tiempo no era muy favorable, el mar estaba muy agitado y el viaje fue bastante movidito. Pero Formentera nos recibió con un día soleado, parcialmente nuboso. La previsión para los 3 días del fin de semana marcaba lluvias, pero no cayó ni una gota.

La Savina (puerto)

Es cierto que no hemos conocido Formentera en su esplendor. Me refiero a que la presencia de esas nubes y la amenaza a lluvia fomentó que el mar no brillara con sus aguas turquesas y cristalinas. Tampoco vimos toda la isla y han quedado cosas pendientes para una segunda visita, esa será la excusa.

Dicen que Formentera la ves en un día. Yo no comparto esa idea. Formentera es para saborearla, y tampoco es tan pequeña. No es cierto que la puedas cruzar andando (leyendas urbanas), el tramo más largo de carretera, de la Savina a la Mola, tiene 19.5 km. Y aunque el medio de transporte más recurrido es la bicicleta o la moto, ya os digo que ir de norte a sur en bicicleta requiere un buen entrenamiento de fondo.

En este viaje nos hemos centrado en la parte norte de la isla. Y precisamente esa parte dispone de un bus circular que funciona a las mil maravillas. Formentera es una isla frágil, la cual requiere conservar su esencia y su parte más salvaje. Es por ello que se cuida con la iniciativa de que el tráfico rodado no crezca. Una manera de hacerlo es fomentando el transporte público o el moverse en bicicleta.

Alquiler de motos.

El uso del Taxi es lo menos recomendable por el coste del mismo. Nosotros lo utilizamos en una ocasión muy puntual y de extremada urgencia, dadas las horas, el sitio y una invasión de mosquitos que nos acribillaban (ya os contaré). Para un tramo 3,4 km nos costó alrededor de 11 euros.

Es Pujols Beach

Nosotros estuvimos alojados en Es Pujols. Elegí esa zona por ser la más turística y por concentrar la mejor oferta de comercio y restaurantes. Al ser septiembre ya no hay tanto turismo, con lo cual a la hora de ir a cenar no tuvimos mayor problema para encontrar mesa. Me refiero a que no estaba masificado, algo que quería evitar.

Para llegar desde el Puerto de la Savina, cogimos el bus de la línea 1. Esta línea es circular y pasa por Ses Salines, Sa Roqueta, Es Pujols, Sant Ferran y San Francecs. Todos los pueblos que vimos son para caminarlos, no hace falta vehículo. De hecho hay ciertas horas que cortan el tráfico para que todo sea peatonal.

Paseo marítimo.
Puestecitos de bisutería.

Nuestro hotel eran unos apartamentos muy cercanos a la playa y al paseo marítimo, donde hay puestecitos de artesanía y bisutería. El apartamento tenía una distribución muy elegante y decorativa. Al entrar hay una sala de estar con cocina office, sofá cama, mesas y sillas y televisor. En la habitación también hay otro televisor, vestidor, y ambas estancias las separa la zona húmeda, compuesta por lavabo de doble seno con tocador y cabina de ducha y de wc. La estancia súper limpia, nueva, con servicio de albornoz y zapatillas. En la cocina, en los armarios, vajilla disponible, todo muy limpio y nuevo. En el salón, cafetera Nespresso con café de cortesía. Son los apartamentos Deluxe (lo comento porque hay otra opción más sencilla). El complejo también dispone de piscina. Os lo recomiendo y mucho: Apartamentos Portu Saler. Además no piden fianza, funciona como cualquier habitación de hotel, con dos llaves/tarjeta.

Dormitorio.
Sala de estar.
Aseo y tocador.
Cocina. Tenía equipamiento de vajilla.
Piscina.

Sorprende que la isla, y sobre todo Es Pujols está muy frecuentada por italianos. De hecho la mayoría de los locales de restauración están regentados por ellos. Parece la «Little Italy». Como os comentaba, la oferta de comercio y restauración es muy amplia. Durante el día puedes cotillear todas las tiendecitas de ropa y bazares, que son numerosos. Por la noche todo el mundo se arregla para salir a cenar y el ambiente es muy animado. Además, los puestecitos de bisutería siguen abiertos hasta la madrugada. También abren pubs de copas, como Alma o 54 Formentera. Nosotros fuimos a cenar a dos italianos, sendas noches, y los dos me parecieron correctos en relación calidad/precio. El más bonito Pizza Pazza, con una decoración preciosa e iluminación de leds. La Pizzería S’Oliveta también tiene una terraza muy agradable.

54 Formentera.
Alma Formentera (cuando no había llegado la pandemia)
Rte. Pizza Pazza.
Little Italy

Muy cerca del hotel, y también fue clave para elegirlo, es lo cercano que está el chiringuito Chezz Gerdi. En la misma playa de nuestro hotel hay un «atajo» por una pasarela de tablas de madera que conduce directamente. El pub está aislado del núcleo urbano, en un entorno más salvaje. Si hay un icono por excelencia en Formentera es la furgoneta hippie Volkswagen de este local, es el mejor photocall que puedas encontrar. En el pub también hay una tienda donde venden su merchandising.

Atajo hacia Chezz Gerdi
Photocall en Chezz Gerdi
Junto a todas las ciudades que me quedan por ver.
Iglesia de San Francecs.

El segundo día salió algo nublado y decidimos visitar el interior, concretamente San Francecs, que es la capital de la isla. Es un pueblo con muchísimo encanto, de verdad que me sorprendió gratamente. Son todo casitas blancas, muy Formentera, algunas con sus típicas puertas azules. Las calles están repletas de tiendas de todo tipo, y eso lo hace muy animado. Los sábados hay un mercadillo de segunda mano, que la verdad no os voy a recomendar porque me pareció escaso, la oferta mediocre y muy cara. En cualquier mercadillo semanal de Valencia encontramos cosas mejores de 2a mano y a mejor precio. Allí la verdad que los precios son descaradamente caros, un timo. Lo que sí recomiendo son los puestos ambulantes de artesanía y bisutería que también instalan, como en Es Pujols, por las calles principales.

San Francesc.
El mercadillo de 2a mano se celebra los sábados y está detrás de la iglesia.
Una de las calles animadas de San Francecs.

Por la tarde decidimos ir a Ses Illetes, nos dijeron que es pecado estar en Formentera y no ir. No contamos con que ahora el sol baja más pronto y la verdad que se nos hizo tarde, de hecho no alcanzamos a ver las aguas turquesas por estar ya teñidas de ámbar. Pero aún así, es todo un lujo y espectáculo ver una puesta de sol en tan maravilloso paisaje. Y como os he dicho antes, enseguida se hizo de noche, además anochece antes que en la península. Y de las recientes lluvias empezaron a volar mosquitos en todas las direcciones. No os quiero ni contar como me dejaron, de ahí la urgencia de pedir un taxi que nos sacara de allí.

Ses Illetes.
Puesta de sol en Ses Illetes.
Restaurante Beso Beach.

En la misma parada de bus para ir a Ses Illetes (que es la de Sa Roqueta) verás el parking de otro de los chiringuitos más conocidos de la isla. Es el restaurante Beso Beach. El reclamo es un banquito situado en la arena donde reza la frase «no hay verano sin beso». Otro típico photocall para las fotos del recuerdo. La idea es hacerte la foto en el banco mientras te das un beso, con quien vayas o contigo misma. Pero tuvimos la mala fortuna de que este año no lo han colocado, dicen que por las restricciones del covid. Al chiringuito no entramos porque hay que ir previa reserva y además había un señor muy fuerte y muy grande en la puerta que intimidaba un poco… Pero lo poco que vimos, ya que está muy cercado, es que estaba hasta los topes, y no parecía muy anti-covid, la verdad.

Faro de la Mola.

En fin, como os digo, nos faltó mucho tiempo para ver todo y verlo bien. Si ya fuimos justos de tiempo con Ses Illetes, imposible ir a el faro de la Mola, al de Cap Barbaria, o a disfrutar de las muchas calas maravillosas repartidas por la costa de Formentera, como cala Saona. Mi sensación es: o vas corriendo a cada sitio, te haces la foto y te vas, o te dejas llevar por sensaciones, disfrute, y saboreas cada sitio que visites como realmente merece. Yo opto por esto último, con lo cual dejo anotado en mi cuaderno de bitácora esas visitas pendientes. Por que «no hay verano sin beso» y Formentera es ese lugar al que siempre querrás volver.

Casa típica junto a Chezz Gerdi.

Os dejo con un vídeo muy gráfico de todo el viaje. Espero que os guste.

LOOKS

Vestido amarillo crochet = ZARA
Chaleco denim = Sin marca.
Bolso = Las Dalias Ibiza.
Sandalias = Mutton Shop.

Kaftan blanco con pasamanería = NATURA.

Vestido naranja print coral = SFERA.
Collar = El sueño de Noa.
Sandalias = Mutton Shop.
Bolso = Hand Made.

Gracias por leerme, por seguirme y por tu comentario. 

cropped-logo-martasalfoto-flecha

www.martasal.es